Se puede llegar en coche fácilmente desde Dublín, disfrutando de la ruta a lo largo del
río Slaney, o bien contratando algún tour en la capital que llegan a la zona en autobús, pero con tiempo limitado y más condicionados. Merece la pena perderse por el Parque Nacional de Wicklow porque
es un lugar tranquilo y espiritual, o ascender hasta la St. Kevin´s Cell, donde hay vistas de todo el valle. Además la variedad de flora y fauna es sorprendente, sobre todo en cuanto a los distintos tipos de aves que pueden avistarse, como cisnes, mirlos, patos, garzas o martines pescadores.